Ciudad de México, 4 de febrero (SinEmbargo).- "Cáncer" es un término genérico que designa un amplio grupo de enfermedades que pueden afectar a cualquier parte del organismo. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), muchos tipos de cáncer se podrían prevenir evitando la exposición a factores de riesgo comunes como el humo de tabaco. Además, un porcentaje importante de cánceres pueden curarse mediante cirugía, radioterapia o quimioterapia, especialmente si se detectan en una fase temprana.
Sin embargo, a pesar de que hoy en día existen muchas más alternativas para la detección y el tratamiento, no es a la ciencia a la que recurren muchas personas. Así, en los últimos años, un número creciente de pacientes con cáncer están recurriendo a tratamientos, rituales dudosos y remedios naturales basados en la idea de que un cuerpo purificado puede curarse a sí mismo.
De acuerdo con la doctora Barrie R. Cassileth, director de investigación de recursos humanos del Cancer Center de la Universidad de Pennsylvania, desde principios de la década de los '80, las personas comenzaron a pasar de las terapias médica ortodoxa hacia lo que él describió entonces como tratamientos que "recuerdan a rituales de purificación religiosa". Los cuales implican una variedad de prácticas poco usuales en la medicina tradicional como dietas especiales (a menudo costosas), consejería espiritual y métodos de purificación o limpieza administrados por profesionales no médicos, publicó The New York Times.
Según Cassileth, los defensores de estas terapias "rituales" a menudo atribuyen cualidades mágicas a determinados alimentos que, afirman, no sólo previenen el cáncer, sino también ayudan a curar el cuerpo, lo que representa "un desafío crítico para la ciencia médica tradicional", porque van acompañados a menudo por factores espirituales y políticos que son considerados por muchos médicos como "antimedicinal".
"Los remedios alternativos de hoy rechazan explícitamente la asociación con los tratamientos estándar, entornos y parafernalia", dijo Cassileth. "Esto es 'antimedicina', haciendo hincapié en la purificación a través regímenes dietéticos, desintoxicación y limpieza interna, o del control de la mente."
Sin embargo, luego de 30 años de discusión las terapias alternativas no sólo no han desaparecido, sino que se han diversificado. Así, aunque en la actualidad sigan apareciendo terapias o curas milagrosas que a todas luces son inverosímiles, los mismos especialistas se muestran más flexibles en la búsqueda de tratamientos que permitan abordar esta enfermedad desde otro ángulo.
Al respecto, la Sociedad Americana Contra El Cáncer (ACS, por sus siglas en inglés) hace especial énfasis en distinguir los términos "complementario" y "alternativo" con los que a veces se refiere a los métodos no tradicionales de diagnóstico, prevención o tratamiento del cáncer o de sus síntomas.
No obstante, aunque ya se puede distinguir de una manera más acertada entre productos/tratamientos milagro y aquellos que están avalados por la medicina convencional, no dejan de sorprender las fuentes de las llamadas "curas potenciales para el cáncer":
1. Muérdago: Los productos químicos en el muérdago pueden retardar o detener el crecimiento del cáncer, según el doctor Brent Bauer, director de Medicina Complementaria y Intergrativa de la Clínica Mayo. Por otra parte, se ha encontrado que el extracto de esta planta prolonga la esperanza de vida en las personas con cánceres de mama, recto, colon, garganta, pulmón y estómago.
Un estudio publicado en la edición de mayo de 2001, de Terapias Alternativas en Salud y Medicina encontró que los participantes con cáncer de mama que recibieron el extracto tenían un tiempo de supervivencia media de 4.79 años, en comparación con los 2.41 años que registraron los que sólo recibieron un placebo.
2. Essiac: El té de essiac es una mezcla de hierbas usadas para hacer una infusión, de la cual se dice tiene cualidades terapeuticas contra el cáncer. El origen de la fórmula es confuso. Mezcla hierbas de la medicina natural del pueblo canadiense Ojibwa, con hierbas europeas. No obstante, la mezcla básica contiene raíces de bardana, olmo americano, acedorilla y raíz de ruibarbo turco. Por su parte, la red médica de Institutos de Salud de la Unión Americana señaló en 2008 que no existe evidencia suficiente para recomendar contraindicar el uso de esta mezcla de hierbas como terapia para cualquier tipo de cáncer.
3. Frambuesas: Las frambuesas contienen ácido elágico, un poderoso antioxidante. Éste estimula las actividades de las enzimas que desintoxican los carcinógenos, según una investigación de Gary Stoner, director del laboratorio de quimioprevención y etiología en la Universidad Estatal de Ohio.
Dicho compuesto también previene el cáncer que causan las sustancias al unirse al ADN, reduce el cáncer en células humanas cultivadas que han sido expuestas a agentes carcinógenos y promueve la muerte celular de las células cancerosas sin dañar las células sanas, publicó el sitio SixWise.com.
4. Chile: La capsaicina, el ingrediente causante del picor en los chiles, algún día podría ser usado en forma de píldora para mantener a raya el cáncer. En experimentos realizados, este compuesto causó la muerte de casi el 80 por ciento de las células de cáncer de próstata en ratones, por el contrario, en los ratones no tratados, los tumores de próstata no tratados con este compuesto registraron un tamaño cinco veces mayor que en aquellos que si recibieron el tratamiento, de acuerdo con un estudio publicado por Cancer Research.
5. Veneno escorpión azul: El mero nombre suena demasiado elaborado, pero se trata del veneno diluido de escorpiones azules, que sólo se encuentran en Cuba, y el cual se ha utilizado para combatir el cáncer durante más de 10 años. Aunque todavía se encuentra en fase de investigación, muchos pacientes reportan que los tumores han desaparecido después de asumir el "medicamento", que está registrada bajo el nombre Escoazul en la Oficina Cubana de Propiedad Industrial.
Las anteriores son muestras de lugares inusuales en la naturaleza en donde puede encontrarse una cura o tratamiento para el cáncer. Sin embargo, lo cierto es que para los más desconfiados, incluso las investigaciones serias pueden parecer inverosímiles, sobre todo si su origen parte de una idea que pueda parecer absurda o innecesaria.
¿DESCUBRIMIENTO INÚTIL?
Tal es el caso de una investigación reciente realizada por químicos de Australia y de la Universidad de California en Irvine (UCI) quienes descubrieron la manera de devolver a su estado original las claras de huevo una vez que ya han sido hervidas. La noticia, por su parte, dio la vuelta al mundo dado lo inverosímil de su apariencia. Pero más allá de eso muchos la tacharon de ser un descubrimiento inútil. ¿Inútil? No estemos tan seguros de esto último.
"Sí, hemos inventado una manera de quitarle lo hervido a un huevo de gallina", dijo Gregory Weiss, profesor de química y biología molecular y bioquímica en la UCI. "En nuestro trabajo se describe un dispositivo para retirar las proteínas enredadas, permitiéndoles reformarse."
La verdad es que se trata de una innovación que podría reducir drásticamente los costos de los tratamientos de cáncer, la producción de alimentos y otros segmentos de la industria de la biotecnología mundial que actualmente asciende a los 160 mil millones de dólares, según publicó la revista ChemBioChem.
"No es tanto que estemos interesados en el procesamiento de los huevos; esto sólo demuestra lo poderoso que es este proceso", dijo Weiss. "El verdadero problema es que hay un montón de casos de proteínas gomosas con las que se pierde demasiado tiempo raspándolas de sus tubos de ensayo y se desea algún medio de recuperación de ese material."
Y es ahí en donde los mismos investigadores destacan las propiedades de este método, el cual "podría transformar la producción industrial y la investigación de proteínas", publicó Science Daily.
De esta manera, un procedimiento similar le proporcionaría a las compañías farmacéuticas que actualmente crean anticuerpos contra el cáncer a partir de células de ovario de hámster, una alternativa más barata. De igual manera, la capacidad de reformar, rápida y de manera barata, proteínas comunes a partir de la levadura o de la bacteria E. coli podrían potencialmente racionalizar la fabricación de proteínas y hacer más asequibles los tratamientos contra el cáncer. Por otra parte, los industriales fabricantes de queso, agricultores y otras personas que utilizan proteínas recombinantes también podrían obtener mayores ganancias.
Actualmente, la OMS promueve la prevención y la detección temprana como elementos fundamentales para detener el aumento de la incidencia de esta enfermedad que en más del 60 por ciento de los casos se concentra en África, Asia, América Central y del Sur. de igual manera, dichas regiones registran el 70 por ciento de las muertes a nivel global, principalmente por la falta de detección temprana de la enfermedad y el acceso a tratamientos.
El último Informe Mundial del Cáncer de este organismo indica que en 2012 se registraron 8.2 millones de nuevos casos y estima que en las próximas dos décadas esa cifra subirá a 22 millones anuales.
Para fomentar medidas destinadas a reducir la carga mundial de esta enfermedad, la OMS, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) y la Unión Internacional contra el Cáncer (UICC) observan el 4 de febrero de cada año como el Día Mundial contra el Cáncer.
