Según las culturas orientales, la vitalidad y la salud de nuestro organismo, dependen de la correcta circulación de la energía a través de los canales que recorren nuestro cuerpo. Imaginemos el lecho de un río, con sus ramificaciones y afluentes diversos… Estos canales poseen puntos específicos, a través de los cuales penetra la energía cósmica que nutre nuestro cuerpo.
Cuando por algún momento la energía deja de fluir libremente y se bloquea, comienzan a generarse desequilibrios emocionales, tensiones y dolores físicos que pueden, eventualmente, causar enfermedades. Para evitar esos problemas, y sus consecuencias, existe una técnica de masaje, también conocida como shiatsu.
El Shiatsu es una modalidad terapéutica de origen japonés, y por ser una técnica sencilla, podemos aplicarla sobre nosotros mismos, aunque también se puede acudir a un especialista. Shiatsu, significa “presión con los dedos” y es un masaje muy placentero que se utiliza para mantener una buena salud y fomentar el bienestar.
Te indicamos algunos ejemplos.
Cabeza
Los masajes en la zona de la cabeza son ideales para sentirse despejado mentalmente, mejorar el estado de ánimo, y mantener la vista descansada. Comienza recorriendo el cuero cabelludo con la palma de ambas manos, en forma circular, presionando levemente y aflojando alternativamente. Continúa tomando las sienes con ambas manos, presiona y afloja las palmas varias veces.
Mediante el dedo índice y el pulgar, tira suavemente del lóbulo de tus orejas hacia abajo y hacia ambos lados. Cierra los ojos y utilizando el dedo pulgar y el índice como una pinza, presiona y afloja sobre el puente de la nariz.
Para terminar, abre y mueve la boca tanto como puedas, de arriba abajo y hacia ambos costados para que los músculos de la cara se movilicen y relajen.
Cuello
Los masajes en la zona del cuello permiten la distensión de la columna vertebral, hombros y brazos. El resultado es “liberar las cargas” (las preocupaciones), que acumulamos sobre nuestros hombros. Mueve tu cuello lentamente hacia la derecha y hacia la izquierda tanto como resulte posible, sin forzar. Luego, con la cabeza hacia abajo y el mentón pegado al cuello, dibuja una media luna, de un lado al otro. Repítelo varias veces.
Para terminar, entrelaza tus manos detrás de la nuca y con los pulgares busca el hueco que está detrás de la oreja, donde termina la mandíbula. Ejerce una suave presión, y afloja. Repítelo varias veces.
Pies
Los masajes en la planta de los pies, resultan fundamentales para desbloquear esta zona, ya que es similar a una antena que absorbe las vibraciones energéticas terrestres.
Sentado en posición de loto, masajea suavemente con el dedo pulgar la planta de los pies, realizando movimientos circulares hasta abarcar la totalidad de la planta y el talón. Luego, presiona con fuerza cada uno de los dedos.
La práctica regular del automasaje es un modo seguro y placentero de liberar tensiones, obtener vitalidad y prevenir enfermedades.